Por momentos coincido conmigo mismo respecto de mis ambiciones y acuerdo en un plazo razonable recibir mucho mas que un par de pechos o montañas siestas países cielos subterraneidades cristales hipótesis labios teoremas uvas silencios yemas ásperas codos plenos de frío viejos tintos y una que otra canción emocionante/ Entonces aparecen los vecinos ejecutores de leyes justas y sin siquiera tocar a la puerta elaboran un purgatorio elástico tanto que los límites de sus dogmas pendulan golpeando los bulbos maduros de mi soledad con cartas que indican fecha, causa pero nunca calor.
/ Un elefante ocupa mucho espacio /